Te quiero por…
por tu mirada penetrante
sumergida en mi mente
cuando la posas sobre mí.
Por tu media sonrisa.
Por el rosa de tus mejillas.
Por tu pelo negro
que baila con el viento.
Por tus manos al rozarme,
por tus pies al pasear.
Por tu humor,
ese gran animador.
Por tu alocada cabeza,
siempre sobre el mar volando
como un águila real.
Por la psicología del demente,
llamada comúnmente
“estar enamorado”.
Por las letras de tu nombre,
por el paseo del sábado noche.
Te quiero, simplemente,
porque eres Anita.
2 comentarios:
Pequeña Anita
tu nunca sales mal
en ningún sitio
Walter te dice:
FELICIDADEEEEES!!! jajajajaja
Bueno, ya soy primero en felicitarte por todo medio humano conocido, menos en persona, claro! jajajaja
Cumple muchos máááás! =)
Publicar un comentario